Ubicado sobre el Lago los Molinos, el complejo está conformado por tres torres de departamentos, un club house, y lancheras. El proyecto acompaña la forma de la montaña, siendo un acto de preservación y no una abrupta intervención. Las torres fluyen a través de un núcleo de circulación que se conecta a los departamentos, y muestra en su recorrido la combinación de los distintos materiales: piedra, hormigón, metal y vidrio. Frente al lago, el edificio se abre para enmarcar vistas únicas.